Príncipe de la Milicia Celestial.

lunes, 30 de septiembre de 2013

Rosario de San Miguel

Se empieza con un Credo y un Padre Nuestro; luego se dice: "Mi ama alaba y glorifica a Dios".  (3 veces)

Luego se dice: "San Miguel, San Gabriel, San Rafael, rogad a Dios por mí y por mi familia".  (3 veces)

Luego se reza un Padre Nuestro y se dice "Quién como Dios".  Y los demás contestan:  "Nadie como Dios".  (10 veces).

Al terminar de decir las 10 veces se vuelve a comenzar como al principio.

Al terminar el Rosario se dice:
Gloria a Dios en cielo, y el la tierra paz a los hombres que ama el Señor.  Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey Celestial, Dios Padre todopoderoso.  Señor, Hijo único Jesucristo.  Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre, tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, Solo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.  Amén


Al terminar esta oración se dice (7 veces):  "Dad Gloria al Dios de los cielos".  Y los demás contestan:  "Porque es eterna su misericordia".

miércoles, 26 de junio de 2013

Oración para rezar en el lugar de Trabajo

Oración para rezar en el lugar de trabajo.
San Miguel Arcángel, Príncipe de la Milicia Celestial,
acompáñanos con tus ángeles en este lugar de trabajo.
Que tus ángeles nos protejan.  No permitas que nada
malo nos pase y que nada malo hagamos.  Y que otra partida
de tus ángeles ¡Oh, Príncipe de la Milicia Celestial!
vuelve a nuestros hogares, Invadan nuestras habitaciones,
rodeen a nuestros seres queridos y los protejan allí donde estén,
allí donde vayan, para que nada malo les pase.  Amén.

jueves, 12 de julio de 2012

Coronilla a San Miguel Arcángel



Historia: Un día San Miguel Arcángel apareció a la devota Sierva de Dios Antonia De Astónac. El arcángel le dijo a la religiosa que deseaba ser honrado mediante la recitación de nueve salutaciones. Estas nueve plegarias corresponden a los nueve coros de ángeles. La corona consiste de un Padrenuestro y tres Ave Marías en honor de cada coro angelical.

Promesas: A los que practican esta devoción en su honor, San Miguel promete grandes bendiciones: Enviar un ángel de cada coro angelical para acompañar a los devotos a la hora de la Santa Comunión. Además, a los que recitasen estas nueve salutaciones todos los días, les asegura que disfrutarán de su asistencia continua. Es decir, durante esta vida y también después de la muerte. Aun mas, serán acompañados de todos los ángeles y con todos sus seres queridos, parientes y familiares serán librados del Purgatorio.

En esta coronilla invocaremos a los nueve coros de ángeles. Después de cada invocación rezaremos 1 Padre Nuestro y 3 Avemarías. Ofreceremos esta coronilla por la Iglesia, para que sea defendida de todas las asechanzas del demonio, y por los que están más alejados de Dios.

Esta es la medalla:

Esta es la guía cuando se cuenta con la medalla, aunque para rezarle no es indispensable tenerla:


Coronilla a San Miguel Arcángel
En el nombre del Padre...
Dios mío, ven en mi auxilio.
Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, etc.
I.- Por la intercesion de San Migeul y el Coro Celestial
de los Serafines, que Dios Nuestro Señor prepare nuestras
armas y así recibir dignamente en nuestros corazones,
el fuego de la Caridad Perfecta.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
II.- Por la intercesión de San Miguel y el Coro Celestial
de los Querubines, que Dios Nuestro Señor nos conceda
la gracia de abandonar los caminos del pecado, y
seguir el camino de la Perfección Cristiana.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
III.- Por la interseción de San Miguel y el Coro Celestial
de los Tronos, que Dios Nuestro Señor derrame en nuestros
corazones, el verdadero y sincero espirítu de humildad.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
IV.- Por la interseción de San Miguel y el Coro Celestial
de Potestades, que Dios Nuestro Señor nos conceda la
gracia de controlar nuestros sentidos y así dominar nuestras pasiones.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
V.-Por la intercesion de San Miguel y el Coro Celestial
de Dominaciones, que Dios Nuestro Señor proteja nuestras
almas en contra las asechanzas del deminio.  Amén
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
VI.- Por la intercesión de San Miguel y el Coro Celestial
de las Virtudes, que Dios Nuestro Señor nos conserve
de todo mal y no nos deje caer en la tentación.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
VII.- Por la intercesión de San Miguel y el Coro Celestial
de los Principados, que Dios Nuestro Señor se digne
llenar nuestras almas con el verdadero estirítu de obediencia.  Amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María
VIII.- Por la intercesión de San Miguel y el Coro Celestial
de los Arcángeles, que Dios Nuestro señor nos conceda la
gracia de dar perseverancia final en la fé, y así nos lleve
a la gloria del paraiso.  amén.
1 Padre Nuestro, 3 Ave María.
IX.- Por la intercesión de San Miguel y el Coro Celestial
de los Ángeles, que Dios Nuestro Señor nos conceda la
gracia de ser protegidos por ellos durante esta vida
mortal, y nos guien a la gloria eterna.  Amén
1 Padre Nuestro, 3 Ave María

Se reza un Paadre Nuestro en honor a cada uno de los siguientes Ángeles
En Honor a San Miguel
En honor a San Gabriel
En Honor a San Rafael
En Honor a nuestro Angel de la Guarda.

Oh glorioso Princípe San Miguel, Jefe Principal de la
Milicia Celestial, Guardián fidelicimo de las almas,
Vencedor eficaz de los espirítus rebeldes, fiel Servidor
en el Palacio del rey Divino,...  sois nuestra admirable
guia y conductor.  Vos Brillais con exelente resplandor
y con virtud sobrehumana, lidbranos de todo mal.
Con plena confianza recurrimos a mos.  Asistidnos con
nuestra afable protección para que seamos más y mñas
fieles al servicio de Dios todos los días de nuestra vida.
V. Rogad por nosotros, oh glorioso San Miguel
Princípe de la Iglesia de Jesucristo...
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de
Nuestro Señor.

Oración
Omnipotente y Eterno Dios, os adoramos y bendecimos
en vuestra maravillosa bondad, y con el misericordioso
deseo de salvar las almas del género humano, habéis
escogido al Glorioso Arcángel San Miguel, como
Príncipe de Vestra Iglesia.
Humildemente os suplicamos, Padre Celestial, que nos
libréis de nuestros enemigos.  En la hora de la muerte,
no permitáis que ningún espirítu maligno se nos
acerque, para perjudicar nuestras almas.  Oh Dios y
Señor Nuestro, guiadnos por medio de este mismo
Arcángel.  Enviadle que nos conduzca a la Presencia
de vuestra Excelsa y divina Majestad.  os lo pedimos
por los méritos de Jesucristo, Nuestro Señor.

Amén.

miércoles, 13 de junio de 2012

Acto de Consagración al Arcángel San Miguel


San Miguel Arcángel, el más noble de las jerarquías angélicas, guerrero
valeroso de Dios Todopoderoso, y el amante celoso de
su gloria, terror de los ángeles rebeldes, y el amor y el deleite de todos los justos,
con el deseo de ser contados entre tus siervos fieles, yo, hoy en día (PRONUNCIA TU NOMBRE)
me ofrezco y me consagro a ti, y pongo, mi familia y todo lo que poseo bajo
tu poderosa protección.
Te ruego no mirar a lo poco, yo, como tu siervo me ofrezco, soy sólo un miserable
pecador, pero toma a bien mirar, en el afecto sincero con el que hago esta ofrenda.
Recuerda que, si a partir de este día, estoy bajo tu amparo, te pido de corazón me
ayudes durante toda mi vida y obtener para mí, el perdón de mis muchos pecados, y la
gracia de amar a Dios, mi querido Jesús Salvador, y mi dulce Madre María con todo mi
corazón.  Obteén para mí la ayuda necesaria para llegar a mí la corona de gloria.
Defiéndeme siempre para librarme de mis enemigos espirituales, sobre todo en los
últimos momentos de mi vida.
Ven, pues, oh glorioso Príncipe.  Sócorreme a mí última lucha.  Con tu alma
poderosa arroja lejos de mí y en el abismo infernal al prevaricador y el ángel orgulloso
que venciste en la batalla celeste.
San Miguel, dediéndenos en nuestras batallas dirarias para que no se pierda en el juicio
Final.
Amén.

lunes, 11 de junio de 2012

Oración a San Miguel Arcángel para protección de todo mal


Oración original a San Miguel para ser realizada sosteniendo un crucifijo en alto
(Levanta el Crucifijo y reza esta oración con la señal de la cruz.
Has esto en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
Tú vencerás... Reza esta oración todos los días, ya que la batalla
es enorme...)

Oh Glorioso príncipe de la Hueste Celestial, San Miguel
Arcángel, defiéndenos en la batalla y en el terrible combate que
estamos librando contra los principados y Potestades del aire,
contra los Dominadores de este mundo tenebroso, en contra de
todos los Espíritus del Mal.  Ven en ayuda del hombre, a quien
Dios Todopoderoso creó inmortal, hecho a su imagen y
semejanza, y redimido por un gran precio, de la tiranía de
Satanás.

Pelea en este día la batalla del Señor, junto con los santos
ángeles, igual que combatiste al líder de los orgullosos ángeles,
Lucifer, y a su hueste apóstata, quienes no tuvieron poder para
resistirse y tampoco hubo lugar para ellos en
el cielo.  Esa cruel serpiente antigua, llamada diablo o Statnás,
que seduce al mundo entero, fue arrojada al
abismo junto con sus ángeles.  Mira, este enemigo primitivo y asesino
del hombre ha tomado fuerza.
Trasformado en un ángel de luz, anda alrededor del mundo con una multitud de espíritus pervesos,
invadiendo la tierra para borrar el nombre de Dios y de Jesucristo, apoderarse, asesinar y arrojar a la eterna
perdición de las almas destinadas a la corona de la gloria eterna.  Este malvado dragón vierte, como la
inundación más impura, el veneno de su malicia en los hombres de mente depravada y de corrupto corazón, el
espíritu de mentira, de impiedad, de blasfemia, y de aire pestilente de impureza, y de todo vicio e iniquidad.

Estos asusntos enemigos han llenado y embriagado con hiel y amargura esta Iglesia, la esposa del inmaculado
Cordero, y han puesto sus manos impías en sus más sagradas posesiones.  En el Santo Lugar, en donde la sede
de San Pedro y el asiento de la verdad ha sido colocados como la luz del mundo, ellos han levantado el trono
de su abominable impiedad, con el designio inicuo de que cuando el Pastor sea herido, también las ovejas
pueden ser heridas.

Entonces levántate, oh Príncipe invencible, dale ayuda al pueblo de Dios en contra de los ataques de los
espíritus perdidos.  Dale la victoria al pueblo de Dios: Ellos te veneran como su protector y patrón; en ti la
gloriosa Iglesia se regocija con tu defensa contra el maligno poder del infireno; a ti te ha confiado Dios las
almas de los hombres para ser establecida en bienaventurazas celestiales.  Ora al Dios de la paz, para que
ponga a Satanás bajo nuestros pies, derrotado para que no pueda más mantener al hombre en cautiverio y
lastimar a la Iglesia.  Ofrece nuestras oraciones a la vista del Altísimo, para que pueda encontrar
misericordia a los ojos del señor, y venciendo al dragón, la antigua serpiente que es el diablo y Satanás, tú
nuevamente lo pongas cautivo en al abismo, para que no pueda ya más seducir a las naciones.

Amén.

L: Miren la Cruz del Señor, y sean dispersos los poderes enemigos.
R: El León de la tribu de Judá la conquistado la raíz de David.
L: Qué tu misericordia esté sobre nosotros, oh Señor.
R: Así como hemos tenido la esperanza en Ti.
L: Oh Señor, escucha nuestr oración.
R: Y deja que mi llanto llegue a Ti.
L: Oremos
Oh Dios, Padre nuestro, señor Jesucristo, invocamos a tu Santo Nombre, y suplicantes imploremos tu
clemencia, para que por la intercesión de la siempre Virgen María, inmaculada Madre nuestra, y por el glorioso
San Miguel Arcángel, Tú le dignes ayudarnos contra Satanás y todos los demás espíritus inmundos, que andan
por el mundo para hacer daño a la raza humana y para arruinar a las almas.

Amén.

Esta oración fue tomada de: Libro de la Devoción a la preciosa sangre de Nuestro Señor Jesucristo.

lunes, 21 de mayo de 2012

Oración a San Miguel Arcángel

San Miguel Arcángel, defiéndenos
en la lucha, sé nuestro amparo
contra la perversidad y acechanzas
del demonio. Que Dios humille su soberbia.
Y tú Príncipe de la Milicia Celeste arroja al
infierno a Satanás y demás espíritus malignos
que vagan por el mundo para perdición de
las almas.
Amén.